Si bien es excelente el sistema de trenes en Francia, para un viaje por Provenza, te recomendamos alquilar un auto. De esta manera, aprovecharás al máximo tu viaje, ya que podrás hacer un itinerario personal y tendrás la libertad de realizar varias paradas en los campos sobre la carretera y en los pequeños pueblos que visites. ¡Te decimos los destinos imperdibles de este road trip por la Provenza francesa!
Oh, Provence! Esta impresionante región al sur de Francia se ha convertido en un destino importante gracias a sus pueblos de cuento, espectaculares campos de lavanda y, sobre todo, a los visitantes que se han encargado de publicar fotos en redes sociales, dándole un boom de publicidad a este destino. Afortunadamente, ciertos lugares se han mantenido relativamente intactos, a pesar de estar cerca de otros destinos populares. Si estás buscando la escapada de verano francesa perfecta, tus vacaciones ideales empiezan con un viaje en la carretera de Provenza.
Oppède-le-Vieux
Este increíble pueblo en lo alto de una colina en Lubernon es accesible para los turistas únicamente caminando. Al dejar el coche, empezarás una caminata a través de bosques y olivares; y una vez en cima, podrás pasear por las calles empedradas, las cuales son sombreadas por los restos de un castillo del siglo XII, descubriendo casas y talleres artesanales restaurados de los siglos XV y XVI.
Roussillon
Este encantador pueblo en el sur de Francia destaca por sus edificios teñidos de naranja y rojo gracias al ocre que se encuentra en la arcilla local. No te tomará mucho tiempo pasear por sus calles ya que es bastante pequeño. Sin embargo, la verdadera atracción se encuentra fuera del pueblo: a pocos minutos del centro de la ciudad, se encuentra el comienzo de Sentier des Ocres, un conjunto de caminos a través de canteras de ocre. Los colores aquí son menos diversos que los del Colorado Provenzal, pero no menos espectaculares, especialmente al final del día en la famosa golden hour.
Plateau de Valensole
Ningún road trip por la Provenza está completo sin una parada en los campos de lavanda en Valensole, los más famosos y visitados de la región. Los campos más fotografiados son los de Lavandes Angelvin, a la salida de la carretera D6-Route de Manosque. Sin embargo, no solamente se encuentran campos de lavanda, sino también hay campos de girasoles si buscas un poco de diversidad en tus fotos. Debido a su popularidad, como pro tip, ve lo más temprano posible para evitar aglomeraciones y encontrar el spot ideal.
Moustiers-Sainte-Marie
Construido en un acantilado sobre el borde de Gorges de Verdon, Moustiers-Sainte-Marie es conocido no solo por ser uno de los pueblos más bonitos de Francia, sino también por su producción de faïence, una cerámica cubierta con un esmalte de estaño blanco y a menudo decorado con colores en la parte superior.
Una de sus atracciones es un manantial que fluye desde el acantilado, creando una cascada; un medio de energía hidroeléctrica para sus habitantes. La capilla Notre-Dame de Beauvoir, es un monumento histórico y se puede acceder a ella a través de Vía Crucis, un camino con 262 escalones.
Gorges du Verdon
Gorges du Verdon y el lago de Sainte-Croix se han convertido en un destino de verano cada vez más popular tanto para los franceses como para los visitantes. Los minerales del agua pintan sus aguas de turquesa. La vista fotografiada más famosa es desde Pont du Galetas en la autopista D957, que se encuentra justo encima de donde el río Verdon desemboca en Lac de Sainte-Croix. La carretera te llevará por todo el lago y conocerás muchas playas pequeñas.
Gordes
Gordes es uno de los pueblos más pintorescos y encantadores de Vaucluse, por ello se ha convertido un lugar turístico durante los últimos años. La comuna se remonta a más de mil años del imperio romano, con un castillo construido en 1030. También, fue un centro de resistencia activo durante la Segunda Guerra Mundial, el cual sufrió un bombardeo en 1944. Aquí podrás pasear por calles de cuento, maravillándote con vistas del campo o relajándote junto a la alberca en La Bastide de Gordes.
Abbaye de Sénanque
Esta increíble y pequeña abadía está escondida detrás del pueblo de Gordes y rodeada de campos de lavanda, que son atendidos por las monjas. Además de cuidar estas flores, también crían abejas. Las ventas de miel y de lavanda ayudan a cubrir sus gastos de manutención y el mantenimiento del edificio. ¡Es un lugar espectacular!
Saint-Saturnin-les-Apt
Con sus calles coloridas y las ruinas del castillo medieval, Saint-Saturnin es a la vez idílico e interesante. Las ruinas del castillo y la capilla restaurada que se encuentran en la cima de la colina se remontan a 1056; y la presa al lado se construyó en 1863 como fuente de agua para el pueblo. Desde este mirador se pueden admirar los tejados, el campanario de la iglesia de Saint-Étienne y los molinos de viento del siglo XVII. Abajo, en el pueblo, no te pierdas las 3 preciosas puertas catalogadas como monumentos históricos.